Leer, ver o escuchar… a todos nos gustan las historias!
Hoy os recordamos la necesidad de leer en un idioma para perfeccionar su aprendisaje y os recomendamos un método para facilitaros la comprensión!
Ya lo sabemos : las historias se componen de palabras que forman frases e expresan ideas y también sabemos que leer nos permite enriquecer el vocabulario en nuestro proprio idioma, y cuando se trata de un idioma extranjero es un mundo entero que se abre ante nosotros. Es precisamente en ese mundo que nos enfrentamos a palabras y expresiones en contexto y hace que sea más facil alcanzar el significado porque el aprendizaje se vuelve más intuitivo y rápido. Por ejemplo, la palabra «vase» aislada podría entenderse como el equivalente de «vaso» en espanol, sin embargo en la frase «je mets les fleurs dans un vase» se entiende mejor que «vase» significa «florero».
Por otra parte, cuando entendemos la idea y adquirimos un nuevo vocabulario podemos usarlo de forma natural en el mismo contexto a la diferencia de esas larguísimas y aburridas listas de vocabulario. Aún así os recomendamos apuntar las nuevas expresiones con su traducción porque, al nivel cognitivo, os llevarán a un recuerdo activo (de la historia, del contexto, de la busqueda de significado…) y no a la idea de un simple copia y pega. Muchas veces, esas expresiones o frases se pueden usar directamente tal cual las hemos encontrado en la historia. Por ejemplo, en una lista de vocabulario «sandwich» significa «bocadillo» sin embargo a la hora de expresar una idea se necesita formular una frase entera «je voudrais un sandwich, s’il vous plaît».
Por otro lado, cuando aprendemos una frase, aunque sea una sucesión de palabras, también aprendemos de forma inconsciente el orden de las palabras y la construccion de las frases. Es decir que en vez de estudiar el esquema de la frase SUJET+VERBE+COMPLÉMENT y poner un ejemplo para entenderlo mejor, nuestro cerebro es el que realiza el proceso a través de la observación y la deducción sin la sensación de estar estudiando.
Además, los audiolibros o podcast nos permiten practicar el oído a la vez que la pronunciacion y la fluidez. A todos nos ha pasado de volver a casa e intentar leer el texto estudiado en clase pero no nos acordamos de la pronunciación correcta de algunas palabras lo que nos puede llevar al error y lo peor es aprender mal porque desaprender en más difícil aun que aprender… Una prueba de ello son esos errores que nos persiguen durante nuestro aprendizaje, que nos somos capaces quitarnos y que generan mucha frustración…
Finalmente, hay que elegir el soporte y el tema a consciencia porque, bien sea leyendo una novela, escuchando un podcast o audiolibro o viendo una película o serie, nos sumergimos en la historia y olvidamos que estamos aprendiendo porque pasamos un momento agradable. Y no nos cansaremos de repetirlo, el placer es imprescindible para un aprendizaje y una motivación que duren en el tiempo.
A la vez que pasamos un momento agradable, las historias nos permiten descubrir un vocabulario nuevo en contexto pero a veces se nos complica la comprension y el placer se vuelve pesadilla… Ahora os damos una pautas para facilitar la comprensión oral:
– Elegir una historia corta para poder escucharla varias veces (dos o tres). Durante la primera escucha, podemos apuntar las expresiones nuevas que entendemos y/o las que no entendemos y buscarlas.
– Cuando tengamos una idea general de lo que ocurre en el documento podemos volver a escuchar con la ayuda de la transcripción para profundizar y finalmente volver a escuchar sin ayuda para disfrutar de una comprensión más completa.